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La fotógrafa Joana França se inspira en las calles adoquinadas de Paraty
Ubicada a mitad de camino entre Río de Janeiro y São Paulo, Paraty (pronunciado “parachi“) ha atraído a la inmigración artística por décadas con sus maravillas naturales, animados restaurantes y centro histórico de la ciudad.
La fotógrafa brasileña Joana França está enamorada de “las ventanas, las coloridas puertas, las lámparas, las calles adoquinadas y la forma en que la naturaleza está presente en la ciudad“, comparte.
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¹Puertas exóticas de Paraty. Joana França
En su última visita donde fotografió la ciudad, “quise mostrar las fachadas bien iluminadas por el abundante sol, dejar que las sombras de las lámparas de la casa se dibujaran en las fachadas blancas y ver cómo resaltaban los colores de las ventanas y las puertas“, agrega Joana. Estos aspectos inspiran su fotografía. “Es una ciudad pequeña. Las calles son estrechas y las fachadas bajas. Lo que lo convierten en un lugar más acogedor“, explica.
³Construcción baja de piedra caliza blanca para mantener fresco el interior. Joana França⁴Puerta azul con marcas geométricas masónicas en Paraty. Joana França
Paraty es distintivo por sus construcciones bajas de piedra caliza blanca, repletas de ventanas y puertas exóticas. El exceso de ventanas y puertas de piedra caliza tienen un porqué, están diseñadas para mantener fresco el interior. Los colores populares como el amarillo, verde, granate y azul también están justificados, ya que la influencia masónica, referente a los gremios de mampostería locales, es una parte integral de la historia del diseño de Paraty, dictada por el azul hortensia. Su influencia también es evidente en símbolos enigmáticos pintados en las construcciones de toda la ciudad. Según Joana, “la masonería colocaba figuras geométricas como distintivo“.
⁵Marco de ventana con detalles en amarillo intenso contra piedra caliza blanca. Joana França
Gracias a las calles libres de vehículos del centro histórico, es fácil recorrer sus 33 manzanas y estudiar las distintas pistas sobre el pasado de Paraty. Ten cuidado al caminar por las calles adoquinadas e irregulares, especialmente si no llevas zapatos planos, y mira bien donde pisas. La colocación parece aleatoria, y varias historias confirman y desmienten ese pensamiento.
⁵El azul y el blanco son dos colores muy comunes en Paraty, Brasil. **Joana França** ⁶Calles adoquinadas y hermosas de Paraty. **Joana França**
Por todas estas razones, Paraty tiene un lugar especial en el corazón de Joana. “Tiene el encanto de una ciudad pequeña pero con restaurantes y posadas estupendas. Y también se puede ir en barco a las islas paradisíacas vecinas después de explorar la ciudad a pie“.
⁷Las puertas rojas, los marcos amarillos y la flora natural dotan a esta casa de identidad propia. Joana França
¡Dag, dag!